Catecismo de la Iglesia Católica

LECCION # 11

EL ORGANISMO ESPIRITUAL
(Versión Resumida)

*          ¿Con qué recursos contamos de parte del Espíritu Santo para progresar en nuestra vida espiritual?

.           La Gracia Santificante es el fundamento básico de esa vida sobrenatural.

.           Las gracias actuales son ayudas que nos impulsan a hacer el  bien.            

.           Las Virtudes son disposiciones que nos ayudan a hacer el bien.

.           Los Dones son ayudas que nos capacitan para percibir las gracias, los impulsos y las inspiraciones del Espíritu Santo y   para poder responder dócilmente a ellos.

.           Los Frutos del Espíritu Santo y las Bienaventuranzas son elresultado de la actuación del Espíritu Santo y del funcionamiento del “organismo espiritual”.

*          ¿Qué es la Gracia Santificante?

Es una cualidad sobrenatural, que Dios nos regala, sin la cual no podemos ser santificados; por lo tanto, requerida para nuestra salvación.  La recibimos inicialmente en el Bautismo.

La Gracia Santificante es la vida de Dios en nosotros (ver Jn. 14, 23).

La Gracia Santificante se pierde por el pecado mortal y se va aumentando por medio de
.           la recepción de los Sacramentos
.           la oración
.           las buenas obras realizadas por nosotros, siempre que las hagamos con pureza de corazón, sin dobleces ni intenciones pecaminosas. (Por ejemplo: no es una obra hecha con pureza de  corazón el hacer apostolado por deseo de poder y figuración; hacer una “caridad” para obtener un favor posterior, etc.).

*          ¿Qué son las Gracias Actuales?

Es la gracia que nos es dada para cada acto de nuestra vida. Es una moción interior del Espíritu Santo que nos hace desear hacer el bien y a la vez es un impulso que nos lleva a realizarlo. 

Aprovechando las gracias actuales, se aumenta la Gracia Santificante.

*          ¿Qué son las Gracias de Estado?

Son las gracias que Dios nos regala para ejercer las funciones a las que nos ha llamado.

*          ¿Qué son las Virtudes?

Las Virtudes son hábitos espirituales.  Para entenderlas mejor veremos que un hábito es una inclinación estable de nuestra alma que nos dispone a obrar con facilidad, prontitud y gusto.

*          ¿Qué son las Virtudes Teologales y cuáles son?

Las virtudes teologales son las que tienen como origen, motivo y objeto inmediato a Dios mismo.         

Las virtudes teologales son la fe, la esperanza y la caridad. (CIC-C #385)

Ellas dan vida e impulsan las demás virtudes, las llamadas virtudes humanas.

*          ¿Qué es la fe?

La fe es la virtud teologal por la que creemos en Dios y en todo lo que Él nos ha revelado, y que la Iglesia nos propone creer.

La Fe es una confiada relación personal con Dios, relación de mente y corazón, con toda la fuerza interior de que somos capaces. 

*          ¿Qué es la esperanza?

Esperanza es esperar con confianza y firmeza lo que Dios nos ha prometido:   la Vida Eterna. 

*          ¿Qué es la caridad?

La caridad es la virtud teologal por la cual amamos a Dios sobre todas las cosas y a nuestro prójimo como a nosotros mismos por amor a Dios. (CICI-C #388)

Caridad es amar a Dios como El nos ama, con el Amor con que El nos ama.  Y amar a los demás como El los ama, como El nos ama.

Caridad es el Amor de Dios.  Y el Amor consiste en que Dios nos amó primero (1 Jn  4, 7 y 10) y con ese Amor podemos amarlo a El y amar a los demás. 

*          ¿Qué son las virtudes humanas (o virtudes morales) y cuáles son?

Son hábitos que perfeccionan las potencias del alma (inteligencia, voluntad y memoria) para hacer lo que es bueno.

La prudencia, justicia, fortaleza, templanza son las principales virtudes humanas, por lo que se llaman también virtudes cardinales. 

Las demás virtudes humanas son las derivadas de las cardinales.  Santo Tomás de Aquino llega a listar hasta 50 derivadas, pero puede haber más.

La principal de las derivadas es la humildad, que es la base de todas las demás virtudes.

*          ¿Qué es la prudencia?

Consiste la prudencia en saber lo que debemos hacer o dejar de hacer para alcanzar la vida eterna en cada situación que se nos presente.

Un rasgo importante de la persona prudente es saber ser humilde y dócil, para pedir consejo o aceptar corrección y orientación de personas sabias.

La principal imprudencia, sin embargo, es la de dar una imprudente sobrevaloración a las cosas terrenas, ocuparnos demasiado o aún exclusivamente de las cosas de este mundo, pero descuidando las cosas que tienen que ver con la vida eterna.

*          ¿Qué es la justicia?

La justicia consiste en la constante y firme voluntad de dar a los demás lo que les es debido

El que practica la virtud de la justicia es capaz de dar a Dios lo que Dios se merece y nos pide.  También da al prójimo lo que éste merece

Derivadas:  religiosidad y piedad, obediencia a Dios (dar a Dios lo que se merece), gratitud, fidelidad, afabilidad, magnanimidad. 

*          ¿Qué es la fortaleza?

La fortaleza asegura la firmeza en las dificultades y la constancia en la búsqueda del bien.

Quien practica la virtud de la fortaleza persevera en su búsqueda del bien, una vez que lo ha reconocido, llegando en caso extremo al sacrificio de su vida.

Derivadas:  Paciencia, perseverancia, constancia.

*          ¿Qué es la templanza?

La templanza modera la atracción de los placeres, asegura el dominio de la voluntad sobre los instintos y procura el equilibrio en el uso de los bienes creados.  (CIC-C #383) La virtud de la templanza tiene que ver con la moderación.  Quien practica la virtud de la templanza, tiene control sobre sí mismo, permite que la razón guíe su voluntad. 

Derivadas:  humildad (templanza en el aprecio de uno mismo), mansedumbre, abstinencia, modestia corporal, sobriedad, castidad, continencia, clemencia, desprendimiento, desasimiento, desapego, frugalidad, sobriedad.

*          ¿Qué son los dones del Espíritu Santo, los llamadosSiete Dones del Espíritu Santo?

Los dones del Espíritu Santo son disposiciones permanentes que hacen al hombre dócil para seguir las inspiraciones divinas. (CIC-C #389)

Son principios sobrenaturales que nos capacitan para recibir los auxilios del Espíritu Santo y para percibir sus inspiraciones e impulsos y para actuar de acuerdo a ellos.

*          ¿Cuáles son los Siete Dones del Espíritu Santo?

Temor de Dios, Fortaleza, Piedad, Consejo, Ciencia, Entendimiento, Sabiduría.

1.         Temor de Dios

El Temor de Dios no es miedo a Dios, un miedo que perturba, sino más bien el sentimiento de respeto  y admiración que abruma ante la inmensa majestad de Dios.

El Temor de Dios es el deseo de corresponder al Amor infinito que Dios nos da, siéndole fiel y no ofendiéndole.

  2.          Fortaleza:

Robustece al alma para hacerla cada vez mas dispuesta y animada a hacer la Voluntad de Dios en todos los aspectos.  Es la fuerza para responder a las inspiraciones del Espíritu Santo.

El Don de Fortaleza nos da empeño, perseverancia, valentía, aguante, paciencia, firmeza ... en el seguimiento al Señor.

  3.         Piedad:

Distinto a lo que pueda parecer que significa el Don de Piedad, no es el don de oración.  Es el Don que nos capacita para sentirnos hijos de Dios y hermanos de todos.  Así que el término piedad en este don se refiere más bien a la piedad que podamos tener hacia nuestros hermanos; más bien se relaciona con la capacidad de ser misericordiosos.

El cristiano que se deja influir por este don, sabe ponerse en el lugar del hermano, no sólo para tratarlo como quisiera él ser tratado, sino para comprenderlo y tener compasión del hermano en sus dificultades.

4.         Consejo:

Es el don que capacita nuestra alma para oír y entender la voz íntima y silenciosa del Espíritu Santo, la cual nos da a conocer la Voluntad de Dios y cómo seguirla. 

El Don de Consejo nos capacita para juzgar qué es más conveniente hacer o dejar de hacer ante circunstancias complejas.

  5.         Ciencia:

Es el Don que nos da una luz especial para dar a las cosas y a las creaturas de este mundo, incluidos nosotros mismos, su justo valor:  el valor que tienen a los ojos de Dios. 

Es el don que nos lleva a adorar a Dios

6.         Entendimiento:

Es el don que nos lleva a profundizar en los misterios divinos.  La Virtud Teologal de la Fe nos lleva a aceptarlos, aunque a veces creamos sin ver (Jn. 20, 29b).   Pero el Don de Entendimiento nos hace penetrar el sentido íntimo de las verdades reveladas.

7.         Sabiduría:

Este don está muy relacionado con el de Entendimiento, pero va mucho más allá, pues es una participación especial en ese conocimiento misterioso y sumo, que es propio de Dios.  

El Don de Sabiduría nos capacita para ver las cosas, las circunstancias, los sucesos, propios y de otros, cercanos y lejanos, como los ve Dios.

*          ¿Qué son los frutos del Espíritu Santo?

Los frutos del Espíritu Santo son perfecciones plasmadas en nosotros como primicias de la gloria eterna. (CIC-C #390)

Enunciados -aunque no de manera exhaustiva-  por San Pablo en Gal. 5, 22: amor, gozo y paz; paciencia, comprensión de los demás, bondad y fidelidad; mansedumbre y dominio de sí.

Cuando el alma es perceptiva y dócil a las inspiraciones del Espíritu Santo, van surgiendo estos frutoso consecuencias de la acción del Espíritu Santo en ella.

*          ¿Qué son las Bienaventuranzas?

Puede decirse que son también frutos del Espíritu Santo, pero mucho más elevados que los llamados frutosIndican un elevado nivel de santidad, que son como un anticipo de la bienaventuranza eterna.

*          ¿Cuáles son la Bienaventuranzas?

            Las enumera Jesús al principio de su predicación en el Sermón de la Montaña.  
Mt 5:
            3.         «Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino de los Cielos.  Nos habla de la pobreza de espíritu:  saber que nada somos o podemos sin Dios.
            4.         Bienaventurados los mansos, porque ellos poseerán en herencia la tierra.   Nos habla de la paciencia y mansedumbre.
            5.         Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados.  Nos habla de la aceptación del sufrimiento con sentido redentor.
            6.         Bienaventurados los que tienen hambre y sed de la justicia, porque ellos serán saciados.   Nos habla del deseo de santidad.
            7.         Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia.   Nos habla de la misericordia y el perdón.
            8.         Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios.  Nos habla de la sinceridad de corazón, de la pureza de intención.
            9.         Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios.  Nos habla de ser pacíficos.
            10.       Bienaventurados los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el Reino de los Cielos.  Nos habla de la persecución a causa de la búsqueda de la santidad y de la entrega a Dios.

*          ¿Puede alguien ganar el Cielo por sus méritos?

Ningún ser humano puede ganar el Cielo simplemente por esfuerzo propio.  El ser salvados es pura Gracia de Dios,  que –sin embargo- requiere la libre cooperación del hombre.

*          ¿Debemos ser santos todos?

Sí.  No hay que tenerle temor o sentirse intimidados por la palabra “santo”.  Santo es todo aquél que está unido a Dios y que busca hacer su Voluntad en esta vida para luego vivir con El para siempre en el gozo infinito del Cielo.

Y para eso es que hemos sido creados por Dios.  Para eso hemos nacido como seres humanos.

 

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